
Esquema de atención en el terreno de juego
PROLEGÓMENOS del partido
Valoración previa. Comienza en el último entrenamiento, en la concentración, en el viaje, en el hotel. La elaboración de la lista definitiva de convocados exige una transmisión fidedigna al entrenador del estado de la plantilla. Se plantean dos posibilidades:
No hay dudas sobre la lista de disponibles. Si hay algún lesionado, no tiene ninguna posibilidad de jugar. El entrenador sabe con quién cuenta y con quién no.
En el esquema de titulares para el próximo partido, uno de los jugadores es dudoso y no se puede determinar con exactitud la posibilidad de que esté recuperado en el momento de comenzar el encuentro. El informe tiene que afinar mucho. Hemos de ofrecer un porcentaje de posibilidades de recuperación y nuestra sensación subjetiva. Tenemos que “mojarnos”, arriesgando nuestra credibilidad y eso es una exigencia que no podemos eludir. Somos parte de un equipo inmerso en una competición. Lo fácil sería descartar al jugador pero nuestra implicación con el entrenador, el equipo y el club nos compromete a una posición solidaria, con riesgo de equivocarnos.
La decisión de convocatoria es del entrenador pero tenemos la obligación de orientarle, dependiendo de nuestro cálculo de posibilidades: que le convoque, que no le convoque, que se concentre como el jugador “19”.
Cuidados previos al partido.
- Atención de las pequeñas lesiones. Nos obliga a llevar un botiquín rodante con todos nuestros recursos terapéuticos (medicación, vendajes, “tapes”, etc.) y a controlar la evolución del equipo en las horas que preceden al partido, con visitas a la habitación de hotel, inspección y tratamiento en vestuario, etc…
- Alimentación e hidratación. Se fijan los menús y horarios de las comidas previas: desayuno, almuerzo y eventual merienda si el partido es tardío. La hidratación con bebidas isotónicas debe ser constante pero lenta y espaciada para evitar acúmulo líquido en el estómago.
- La declaración antidopaje
- Debemos llevar una relación de medicamentos de declaración obligatoria, con el permiso correspondiente de la Comisión Nacional, obtenido mediante FAX, para poder adjuntarlo a la declaración “in situ” si llega a realizarse el control.
- Antes del partido se rellena un formulario con la relación de medicamentos tomados la última semana. Para involucrar al jugador y co-responsabilizarlo en la declaración, preguntamos a cada uno de los convocados y trascribimos las respuestas en su presencia.
- Se entrega una copia de la declaración, en sobre cerrado, al árbitro antes del comienzo del partido.
EL PARTIDO.
1. Dotación instrumental.
- Botiquín de mano
- En todos los banquillos, el equipo de casa pone a disposición de los dos equipos contendientes un desfibrilador para solventar un caso de parada cardiorrespiratoria.
- Equipo de apoyo de Cruz Roja, camilla y automóvil de evacuación
2. Instalaciones.
- Trayecto de evacuación bien estudiado para evitar complicaciones de traslado de un accidentado
- Box de atención al accidentado, generalmente en el propio vestuario. En ocasiones en el botiquín del campo.
- Servicio de evacuación con ambulancias sencillas y medicalizadas
3. En el banquillo
- La actitud del médico. Recomienda la asociación de médicos de fútbol una discreción y compostura muy difícil de mantener cuando el médico es un miembro más del equipo, un elemento del banquillo, que participa activamente en las manifestaciones de la dinámica de grupo.
- Atención a las incidencias del partido, saber en cada momento si es necesaria su asistencia.
4. Desplazamiento hasta el lesionado. Se deben interpretar los signos que indican la gravedad de la lesión a distancia lo que modula la velocidad de desplazamiento.
5. Valoración de la lesión “al segundo”
- De la importancia vital de la lesión
- De la gravedad de la lesión
- Si va a permitir o no su continuidad en el juego
- Si precisa medios excepcionales de evacuación, inmovilización de una fractura, transporte
- Si precisa medios excepcionales de tratamiento: cohibir una hemorragia, suturar una herida, reducir una fractura
El médico debe valorar y decidir con gran premura de tiempo, con la presión ambiental en el “teatro”, subido al escenario y rodeado de público, a veces con retransmisión en directo por TV, más la presión indirecta del árbitro, jugadores y técnicos que esperan en el banquillo.
6. Valoración de la lesión “en la banda”
- Puede o no continuar jugando
- Existe o no peligro vital: pérdidas momentáneas de conciencia, contusión craneal.
- Existe peligro de aumentar la gravedad de la lesión: distensión o sobrecarga muscular, luxaciones o fracturas de miembros superiores, esguinces de rodilla o de tobillo.
- Se trata de una lesión dudosa, que no es posible diagnosticar en un momento pero “en un momento” tenemos que decidir su alcance: lesiones articulares de tobillo y rodilla
- Tratamientos de urgencia: cómo cohibir las hemorragias, cómo suturar las heridas, cómo realizar pequeñas inmovilizaciones.
TRATAMIENTOS EN EL VESTUARIO
- Valoración calmada, con más tiempo, del jugador retirado
- Evacuación al hospital
- Procedimientos de urgencia en el vestuario. Intervenciones menores, tratamiento de las heridas, reducción de fracturas y luxaciones, inmovilización.